Convertir el RECURSO MÁS VALIOSO en el MÁS COSTOSO

Convertir el RECURSO MÁS VALIOSO en el MÁS COSTOSO

Todas las empresas dependen de su personal. Esta es una realidad a la que ninguna empresa es ajeno.

Durante años hemos visto empresas que invierten grandes cantidades de dinero en sus recursos humanos porque saben que su personal es el que realiza las transformaciones, ofrece el servicio y asegura los procesos, pero, por otro lado, también conocemos organizaciones que buscan la forma de invertir la menor cantidad de dinero por su mano de obra, incrementando de manera importante los beneficios para sus socios, sin percatarse que poco a poco no habrá quién quiera realizar las tareas que tienen hasta quedarse prácticamente sin personal o bien, quedándose con personal resentido y lastimado que buscará cualquier oportunidad para sacar ventaja personal en detrimento de la empresa.

Sin embargo, aún las organizaciones que pagan bien y ofrecen excelentes prestaciones a su personal se está quedando si gente y la que contrata en poco tiempo renuncia.

¿Qué está ocurriendo en el mercado laboral en México?

La respuesta a esta pregunta tiene mucho que ver con los cambios que se han venido dado gradualmente y tienen que ver con varios fenómenos que finalmente confluyen en un mismo punto.

Curiosamente, la fuga del talento no solamente se localiza entre personal de nuevo ingreso o de nuevas generaciones, sino que también se ubica en los mandos medios, con personas mayores de 40 años, con puestos de liderazgo o con habilidades administrativas valiosas para la organización. También se está presentando una fuga de talento en estos niveles pero con menor intensidad.

Afortunadamente, hemos encontrado un porcentaje muy pequeño de empresas donde no encontramos movilidad en el personal. Si, sorpréndete, hay empresas con 0% de rotación, aunque debo decir que equivalen a cerca de un 15% de las que conocemos.

El escenario futuro.

Todas las evidencias nos señalan claramente que esta situación continuará y se agravará en el futuro en la mayoría de las empresas del país. Como tonto consuelo podemos decir que esta situación se está presentando en todo el mundo sin que, al parecer, haya una solución próxima.

Naturalmente, las empresas no pueden dejar de trabajar y producir, existe una demanda de productos y servicios de las empresas establecidas y en crecimiento, es inevitable. “El show debe continuar”, pero cuando diriges una empresa de venta al detalle con 50 sucursales repartidas por todo el país y en ellas te enfrentas a esta situación, te encontrarás en un verdadero aprieto que puede poner en riesgo la viabilidad de tus unidades por falta de personal. Si no soluciones el problema cuanto antes, recibirás una gran cantidad de quejas de clientes, reclamaciones por entregas tarde o demandas por incumplimiento. Este es un escenario catastrófico al que cada día nos acercamos más.

¿Qué hacer ahora mismo?

Como una solución rápida las empresas han fortalecido sus áreas de reclutamiento, selección y contratación de personal, sin embargo, el problema prevalece debido a que no es una solución real contratar más personal indefinidamente, sabiendo que la permanencia de los nuevos empleados será muy breve. Además, el costo de la rotación del personal se incrementa de forma exponencial.

Es natural tener una rotación anualizada hasta del 10%, pero cuando este límite supera el 25% estarás pagando una fortuna por reemplazar al personal que se ha ido, con la certeza de que este personal no alcanzará a desarrollar adecuadamente las operaciones por las que lo contrataron antes de tener que buscar un sustituto.

Parece ser un problema de sin final y sin una solución que pueda enfrentarse de esta manera.

Saber cuanto te está costando la rotación del personal.

En Instituto Discere generamos una hoja de cálculo para costear el gasto que resulta de reemplazar al personal, obteniendo como conclusión que, dependiendo de la empresa y lo complejo de sus operaciones, el costo de reemplazar a cada empleado oscila entre el costo del salario integrado de la persona multiplicado por 2.5 pudiendo llegar a 4. Si a su vez sumamos esta cuenta con el número de personas que tuvo que contratarse en un año, la cifra resulta extremadamente elevada. Este es un costo oculto al que la Dirección ya está acostumbrándose a pagar y se diluye en los costos operativos sin lograr una solución definitiva que corte de tajo el problema. El nuevo personal seguirá retirándose muy pronto.

Lo peor de todo es que el problema de origen persiste y constantemente se tendrá que reemplazar al personal que se ha ido, reduciendo de manera permanente la eficiencia que necesita la organización para obtener sus utilidades.

Mientras tengas puestos de trabajo vacantes te harán falta personas que lo realicen, pero, peor aún, si las personas de reciente ingreso no han cubierto el período de aprendizaje, realizarán las tareas en un nivel inferior de calidad mientras alcanzan el estándar mínimo necesario para ser aceptable. En pocas palabras, reducirán la eficiencia de la empresa y con ello sus utilidades.

¿Este problema surgió del COVID?

Es natural pensar que después de la pandemia de COVID-19 muchas personas fueron despedidas y ahora habrá que reponer los puestos que quedaron vacantes durante estos 2 años pensando que es un problema pasajero, pero no es así.

Es natural pensar que con la aparición de la Pandemia de COVID-19, en que tuvimos que despedir a un número importante de personas, con la lenta revitalización de la economía que tuvo 2022, muchas personas se reintegraron a sus puestos de trabajo, sin embargo, en un elevado porcentaje esto no sucedió, dejando puestos vacantes inevitablemente.

El entorno laboral durante la pandemia

Durante este período muchas personas sin un trabajo buscaron formas de obtener un ingreso formal o informal, de manera presencial o a distancia. Por esta razón mucha de la mano de obra que se tenía en el pasado dejó de estar disponible en los años consecutivos hasta el día de hoy.

Por otra parte, pocas personas estarían interesadas en regresar a un lugar donde recibían malos tratos, un salario inferior o condiciones laborales que en eran inaceptables. Nuestra mano de obra también había aprendido que podría conseguir un mejor trabajo o nuevas formas de obtener ingresos sin tener que regresar a su viejo puesto de trabajo.

El personal administrativo y el trabajo a distancia

En el caso del personal administrativo, el trabajo a distancia ofreció una gran oportunidad para las personas capaces de mantener un orden y disciplina que dependía enteramente de cada persona. Muchos de ellos fueron capaces incluso de trabajar con más de una empresa, organizar sus tiempos e incrementar su calidad de vida. Se dieron cuenta de que eran competentes en un mercado laboral que necesitaba su experiencia y capacidades. Regresar a la empresa cuando habían recibido una mejor oferta en alguna otra organización sería absurdo, finalmente la antigüedad y el salario podría manejarse con la nueva empresa. Muchos de ellos tomaron la decisión de no regresar, mientras que otros más analizan sus nuevas oportunidades que en el pasado no les había llamado la atención.

Retener al personal ante todo.

Existen nuevas reglas para localizar, contratar y proporcionar nuevo personal, pero esto no significa que se está fortaleciendo el área de recursos humanos, cuya contribución a cualquier organización es garantizar permanentemente que la empresa cuente con suficiente personal, además de competente. Es imprescindible retener al personal que ha sido contratado, para lo que no será suficiente la contratación continua de nuevo personal.

Puedes crecer al doble tu equipo de recursos humanos dedicado enteramente al reclutamiento y selección, pero esto no garantiza que se queden en la empresa por mucho tiempo. Es fundamental crear nuevas estrategias para retenerlos y en este caso tampoco es suficiente incrementar el salario porque cualquier empresa cercana ya lo está haciendo.

Identificar dónde se concentra la mayor rotación de tu personal.

Si analizas dónde se centra la rotación de tu personal te encontrarás que se localiza en la base de la organización, que corresponde al camino natural para el personal de nuevo ingreso, pero además son las áreas donde se le da menos importancia al recurso humano, incluso es donde se generan la mayor parte de los conflictos entre jefe y subordinado.

En muchas empresas existe la creencia de que al personal de las nuevas generaciones ya no se les puede decir nada sin que se ofendan y dejen el trabajo. En parte esto es cierto, pero obedece a otras razones y no simplemente por la falta de docilidad de la persona en cuestión. En la mayoría de los casos se debe a distintos factores relacionados con el “nuevo paradigma del personal” que exige edificar una nueva forma de desarrollar el trabajo en equipo.

Ahora bien, el trabajo en equipo luce cuando se tienen personas correctamente alineadas a los procesos de la empresa y eso precisamente forma parte de la contribución que cada líder debe aportar a la organización, dentro de los límites de sus propios procesos, sin embargo no siempre sucede así.

La diversidad de estilos de liderazgo

En la gran mayoría de las empresas encontramos todo tipo de jefes que pretenden actuar como líderes, sin embargo muchos de estos “estilos” han sido desarrollados bajo la cultura del pasado donde se definía a los líderes como autócratas o participativos, pasando por una serie de clasificaciones que los engloban a todos.

Hoy día, frente al nuevo comportamiento del trabajador y el nuevo paradigma del personal debemos crear también un nuevo paradigma de liderazgo que se convierta en una norma en toda la empresa. Por cierto, este nuevo paradigma de liderazgo no tiene que ver absolutamente nada con el estilo característico de cada líder, simplemente se trata de edificar liderazgos auténticos, legitimados por los subordinados, que les permita obtener de todos sus integrantes un nivel de compromiso de lealtad. Solamente así podemos edificar verdaderos equipos de trabajo, donde cada elemento se compromete con el resto, respeta a su líder, conoce su Visión de área, aporta y regula el comportamiento del resto.

La generación del verdadero trabajo en equipo.

Lo que hasta el día de hoy conocemos como trabajo en equipo ha perdido vigencia porque un verdadero equipo debe comprometer a todos sus participantes sin faltar ninguno. Solamente de esta manera podremos tener personas completamente integradas a la empresa y eliminar para siempre la rotación del personal.

Un equipo de trabajo plenamente integrado, donde su líder ha sido legitimado y calificado como extraordinario, nunca tendrá problemas de ausentismo, rotación o conflictos con sus subordinados, sino que por el contrario, habrá personas queriendo integrarse a la dinámica del equipo y trabajar junto con el líder.

Te preguntarás ¿Qué empresa tiene estos niveles de compromiso? Existen, muchas de las que tú conoces también, donde su rotación es igual a CERO. Ellos han logrado conseguir esta integración y sus colaboradores se sienten orgullosos de su equipo, identificados con su líder y acogidos por su empresa.

¿Cómo se llega a este nivel? Implementando el nuevo paradigma de liderazgo y modificando las conductas que lo contravienen.

La gente busca trabajo, pero no quieren trabajar para cualquier jefe, buscan un líder legítimo y una empresa que los respalde. Hoy día ellos tienen en sus manos la decisión y pueden elegir con quién trabajar.

¿Tu empresa ya está preparada para enfrentar el nuevo paradigma del personal?

Tenemos una estrategia probada que te permitirá conservar a tu personal indefinidamente.

Conoce el Curso: Retención de Personal.

Nuestra Garantía de Servicio

Todos nuestros procesos de intervención garantizan los resultados prometidos siempre y cuando las personas que intervienen en los procesos cumplan cabalmente con los compromisos que adquieren en ellos.

Esta garantía se extiende únicamente a los procesos que ayudamos a implementar, limitado a sus alcances previstos.

Ramón Miguel Partida Islas

Director y fundador de Instituto Discere.

Estandarizar, factor clave del éxito en los negocios.

Estandarizar, factor clave del éxito en los negocios.

La competitividad de las PyMES muchas veces se empaña por la calidad irregular.

Existen procesos clave para cada negocio. Para unos su éxito radica en su ubicación, mientras que para otros el precio es el que lo determina, pero no siempre éste es el único factor de define la compra del cliente, uno de los más determinantes es la estandarización de la calidad en el producto o servicio ofrecido. (más…)

10 habilidades características del liderazgo legítimo.

10 habilidades características del liderazgo legítimo.

Un buen día tu jefe te ofrece la oportunidad de ocupar un nuevo puesto como jefe de tu área, con las nuevas responsabilidades que esto implica. En ese momento quisieras desarrollar todo tu liderazgo de manera instantánea, desafortunadamente ampliar el potencial que tienes implica que apliques un conjunto de habilidades que hacen del liderazgo una disciplina holística que madura y se desarrolla gradualmente en ámbitos que muchas veces no imaginamos. Se es o no se es líder. No se puede ser un excelente líder en el trabajo y por otra parte ser una persona altanera y despectiva con los demás fuera de la empresa. El liderazgo es algo que se lleva desde el interior de la persona por exigir una serie de comportamientos relacionados íntimamente con los valores, es por esta causa que resulta tan común encontrar personas que sustentan un liderazgo ilegítimo, finalmente más tarde o temprano se desmoronarán por falta de coherencia. Un líder lo es en todas sus esferas y es evidente para todos. 

Te presento las 10 habilidades características del liderazgo legítimo:

1. Habilidades de comunicación.

La habilidad de comunicación abarca al menos cuatro características:·         Asertividad.·         Empatía.·         Interacción.·         Interrelación. No existe líder sin habilidad para establecer comunicación con sus iguales y subordinados. Puesto que tiene que tratar con todo tipo de personas de distintos niveles y conductas debe tener esta habilidad. Si eliminamos la habilidad de comunicación en la persona su ausencia de liderazgo es notable. La comunicación eficaz es el único medio con que las personas logramos los objetivos que pretendemos.

2. Visión participativa.

Un buen líder necesariamente tiene la capacidad de anticipar los hechos por acontecer con claridad y precisión, esto es poseer liderazgo visionario. Si bien es cierto que conocemos muchas personas que han desarrollado la capacidad de anticipar los eventos con precisión, la visión del líder debe poder participarse a las personas indicadas a fin de lograr los objetivos que se ha trazado. No solo es necesario tener desarrollada la capacidad de visualizar el estado futuro de las cosas, sino que además es fundamental saber participar a las personas adecuadas esta información.

3. Habilidades estratégicas.

Las habilidades estratégicas se refieren a los conocimientos administrativos, la información que domina y la experiencia en gestión, aplicados al desarrollo de estrategias adecuadas para lograr los fines que persigue el líder en beneficio de la organización y el grupo que dirige. No es igual una estrategia que una táctica. La estrategia es el conjunto de tácticas que sumadas logran lo que la estrategia pretende conseguir. El conjunto de conocimientos y capacidades de la persona, además de su actualización constante relacionada con lo que acontece en los grupos de interés donde participa, le permiten diseñar las estrategias adecuadas para lograr objetivos específicos.

4. Habilidades tácticas.

Al igual que en el caso de las habilidades estratégicas, las habilidades tácticas se refieren a su capacidad de organización a fin de implementar eficazmente las tácticas surgidas de la estrategia. Su seguimiento, seguridad en la implementación, la reducción de riesgos el manejo de controles forman parte de esta habilidad.

5. Capacidad de generar trabajo en equipo.

Cuando se sustenta un liderazgo legítimo debemos considerar que no existen “llaneros solitarios” que son las personas capaces de hacer por sí mismas sin ayuda alguna prácticamente todo. Existen personas incapaces de trabajar en coordinación con otros. Son poco tolerantes y se les dificulta llegar a acuerdos o reconocer que otras personas podrían hacer determinada tarea con mayor habilidad o precisión, simplemente ellos creen poder y saber hacerlo sin ayuda de nadie más. El líder legítimo es colaborativo y a su vez participativo, permite que otros intervengan y lo hace de modo que su tolerancia hacia los demás es aceptable, dicho de otra forma, permite el aprendizaje y desarrollo de otros porque sabe que aun cuando él podría hacer las cosas bien, la suma del esfuerzo de otros le beneficiarán tarde o temprano. Es colaborativo y capaz de detonar en otros el deseo de hacer las cosas.

6. Habilidades para desarrollar a sus subordinados.

Si bien, un buen líder es un promotor del trabajo en equipo, pero además es característico en esta persona su alto interés en desarrollar las potencialidades de sus subordinados así como de las personas con quienes se relaciona. Un líder auténtico ven en las personas que le rodean su potencial y por esta razón es a la vez una persona que promueve constantemente el desarrollo del potencial de la persona.

7. Moral y auténtico.

El líder coherente es una persona con alta moral, esto significa que sustenta sus principios y valores por encima de intereses no legítimos. Cuando hace esto se transforma en un líder moral que es seguido y admirado por su coherencia. Prácticamente todos hemos sido testigos de eventos desagradables en líderes que supuestamente son auténticos que, al ser descubiertos en cuestiones de faltas a la moral, la ética, los principios y valores, ven desmoronar todo su liderazgo. Dejan de ser seguidos y sobre todo respetados.

8. Motivación permanente.

El líder auténtico se muestra motivado a sí mismo y es capaz de motivar a otros. La motivación se manifiesta de muchas maneras como proyectos nuevos; visión participativa; constante búsqueda de nuevas formas de resolver problemas, etcétera. La motivación permanente es una característica del líder que lo lleva a todas las esferas de su vida, tanto en sus aspectos personales como profesionales.

9. Apasionado del detalle.

El líder tiene la peculiaridad de cuidar mucho los detalles, es un hábil administrador y no deja al azar el control de todo aquello que pudiera salir de control. Traslada sus preocupaciones en el detalle fino y autoriza a su personal a tener cuidado en estas que pudieran parecer minucias.

10.  Satisfecho con su calidad de vida.

Por lo regular, el líder auténtico está satisfecho con su calidad de vida, esto no implica de ninguna manera que no aspire a mejorar en distintos aspectos, sino que no se conflictúa sino que disfruta plenamente lo que tiene en el momento actual, así perciba un salario que podría ser mejor, en espera de mejores oportunidades que más tarde o temprano se le presentarán. En este aspecto no conozco ningún líder legítimo que se preocupe por lo que no tiene y quisiera tener. Su actitud está más orientada a sus logros y disfrutar lo que sí tiene que anhelar aquello que todavía no tiene.  Puede haber muchos aspectos más que no he tocado en este artículo, pues no pretendo ser exhaustivo. Debo señalarte que todos estos aspectos que forman parte del desarrollo de un liderazgo legítimo y coherente que forma parte de la metodología que se ofrece en las Guías de Liderazgo. Si deseas desarrollar plenamente cada uno de los aspectos aquí mencionados, vale la pena que te suscribas a las Guías donde pongo en tus manos el método, de forma que gradualmente podrás ir desarrollando cada uno de estos aspectos en tu persona.

Un liderazgo auténtico siempre será un recurso valioso y altamente apreciado.


 

Desarrollar un liderazgo legítimo frente a las nuevas generaciones que aparentemente «no quieren trabajar» representa un reto que hemos enfrentado en Instituto Discere a través del Curso: Retención de Personal, en el que desarrollamos las habilidades necesarias para consolidar el liderazgo de nuestros participantes frente a su personal, evitando con ello su renuncia y generando equipos de trabajo sólidos y consistentes.

El Liderazgo legítimo debe ser autenticado por los colaboradores, no basta una encuesta de clima laboral.

Finalmente, el liderazgo legítimo se demuestra con el nivel de lealtad que se obtiene de los colaboradores, pero debes recordar que la lealtad es un valor que solamente puede ser recíproca.